!Al final del túnel!
Es una pena que en los tiempos que estamos, aún sigamos en este punto. Nuestra sociedad, la sociedad del Estado de Bienestar en la que están reconocidos constitucionalmente nuestros derechos fundamentales como personas para obtener una calidad de vida óptima, no sea accesible para todos. Todos deberíamos disfrutar de esos derechos en igualdad de condiciones, porque todos tenemos derecho a la búsqueda de la felicidad.
Por ello, debemos procurar facilitar recursos a quien los necesiten y potenciar sus habilidades para que sea posible su integración.
Actualmente y en la mayoría de las familias, disponemos de todas las comodides posibles,desde un armario lleno de ropa, un plato de comida en la mesa, amistades con las que podemos contar y compartir, tenemos cubiertas necesidades familiares, sanitarias, sociales, educacionales, laborales y afectividades con una relación de pareja. A veces no valoramos todas estas garantías hasta que la perdemos o nos encontramos en una situación crítica que desequilibra nuestra estabilidad y seguridad, incluso a veces nuestra fortaleza mental.
Desde hace unos años nuestra sociedad ha empezado a cambiar, parece que estamos retrocediendo a épocas pasadas donde la diferencia de clases es más acentuada, los ricos se mantienen sus poderes y estatus mientras que las familias corrientes se acercan al umbral de la pobreza. Siempre hemos ignorado a las personas excluidas socialmente creyendo que nunca estaríamos en su situación aunque observamos que muchas familias se ven derivadas a la pobreza por diversos factores sociales, principalmente pérdidas laborales.
Es por ello tan importante en la concienciación de la población, la sensibilidad del ciudadano de manera global para que se puedan prestar unas medidas adaptadas a las familias desfavorecidas. A mi entender el Estado es el principal responsable y debe proporcionar, administrar y controlar y priorizar medidas más específicas y factibles, con resultados más óptimos en la que se pueda llegar a la integración de todas las personas en exclusión social, distribuyendo mejor los recursos y garantizando los derechos anteriormente citados.
Es cosa de todos tener conciencia de estos problemas, es cosa de todos facilitar una mejor integración y optar por un desarrollo personal y calidad de vida mínimos.
Con esto y algunas cositas más, esperemos ver el final del túnel.
